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Basura + Cero = Basura

El Plan Basura Cero planeado por el gobierno porteño, está cada vez más lejos de llevarse a cabo. El programa proponía, por medio de la ley 1854 (sancionada en 2005 y reglamentada en 2008), reducir progresivamente el volumen de residuos que la Ciudad de Buenos Aires envía a los rellenos sanitarios. La primera etapa, para 2010, proponía reducir en un 30 por ciento el envío de residuos al CEAMSE, además de hacer un fuerte hincapié en la separación de origen es decir, la separación domiciliaria de los residuos secos de los húmedos; los primeros para ser recuperados y los húmedos para ser tratados.

Nada de esto ha sucedido aún, por el contrario se incrementó el gasto público para el plan Basura Cero pese a que se aumentó la cantidad de residuos enviados a los rellenos sanitarios. El contrato de la basura pasó de 1.925.330 en 2011 a 2.549.037 millones de pesos para el año en curso; esto significa un aumento en el presupuesto de un 33 por ciento.

Actualmente la recolección de basura reciclable de CABA tiene un doble circuito de circulación. Por un lado, el circuito formal que está a cargo del gobierno porteño y que es el que recibe y organiza el CEMSE; por otra parte el informal está relacionado con la junta de residuos, principalmente papel y cartón por cartoneros que son trabajados en galpones de reciclajes (algunos con mayor grado de legalidad que otros). Existen dos tipos de Galpones, aquellos que funcionan como distribuidores para industrias y que compran a otros galpones el material reciclado (y que funcionan como una empresa) y los que funcionan de forma más irregular pero son aquellos que reciben los residuos directamente de los recolectores.

Según el Área de Investigación de la Dirección General de Políticas de Reciclado Urbano, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el CEAMSE recolecta diariamente 4758,5 toneladas de basura por día mientras que lo recolectado por el circuito informal asciende a las 600 toneladas diarias, lo que esto produce es una desorganización y falta de sistematización acerca de la información y la circulación de dichos residuos. Por eso es fundamental que puedan integrarse los trabajadores informales a los circuitos de reciclado formal.

Por otra parte la ONG internacional Greenpeace denunció que el municipio porteño debió enterrar 1.048.000 toneladas de basura, pero envió a relleno más del doble: 2.110,122 toneladas. Esa cifra representa un aumento del 14,3 por ciento respecto de 2009.